En ocasiones nos sentimos como los náufragos que están en una isla desierta, y que lanzan sus mensajes dentro de una botella con la esperanza de que algún día alguien venga a rescatarles. Yo mismo he tenido en ocasiones esta actitud de orar de una manera un poco mecánica, sin demasiada expectativa de recibir una respuesta de parte de Dios. ¿Te ha pasado esto a ti también?
El apóstol Santiago nos dice que “la oración eficaz del justo puede mucho” (Santiago 5:16), y pone como ejemplo al profeta Elías. Su oración cerró el cielo durante 3 años y medio, y cuando oró de nuevo por lluvia, ¡volvió a llover! Eso sí que es una oración eficaz😀
Querido(a) amigo(a), tú también tienes la capacidad de orar, como dice este pasaje, “de manera eficaz”. No es algo que esté reservado para grandes profetas o héroes de la fe: tú también puedes hacerlo, y a lo largo de esta serie vamos a ver cómo. ¡Tus oraciones tienen mucho poder!
Únete conmigo ahora en oración: “Señor, te doy gracias porque sé que estás conmigo en este día y siempre. Gracias por lo que me vas a enseñar en estos días acerca de la oración. Te pido que me ayudes a poner estas enseñanzas en práctica, y a tener más discernimiento a la hora de orar, para que pueda hacerlo de una manera poderosa y eficaz. En el Nombre de Jesús. ¡Amén!”
En medio de esta situación del Coronavirus, te animo a que sigas orando, y a que no desfallezcas. Que tengas un día extraordinario en la Presencia de Dios.
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